CORONAS VISIGODAS

Durante estas semanas, expondremos en la biblioteca las dos recreaciones de coronas votivas que los alumnos de 1º de Bachillerato de Arte han realizado en Fundamentos del Arte con su profesora Patricia Bernal.

Una corona votiva era un objeto muy preciado. Consistían en grandes cercos de metal precioso, cuajados de pedrería y adornados con pendientes de vidrio, metal, perlas, etc. que después de haber servido para la coronación de un rey, se ofrecían para ser suspendidas sobre el altar o debajo del baldaquino, expresando casi siempre alguna inscripción latina con el nombre del oferente. Del centro de la corona pendía una cruz votiva que podía servir a la vez para cruz de altar. 

Os dejamos con el Tesoro de Recesvinto, corona ofrecida por el rey visigodo (649-672) y joya principal del más importante tesoro aparecido en el contexto europeo de la Alta Edad Media: el Tesoro de Guarrazar. Su inscripción dedicatoria testimonia la estrecha conexión entre la Iglesia y el poder real.